Como no podía ser de otra forma, todo comenzó en plan amiguete: cafetito de confraternización del capi con el equipo visitante (en plan las comidas que se pegan Florentino y Rosell, pero a lo pobre) y alabanzas y pullitas cariñosas a partes iguales:
- Jefe, pago yo la ronda para compensarles a estos el disgusto que les vamos a dar...
- Cómo me alegro de verte, lástima que sea en estas circunstancias...
- Que sepáis que hoy no hay tablas, a degüello todas las partidas...
- Pues se ha quedado muy bien el local, aquí no tenéis acequias ¿verdad?... (ver entrada anterior).
Y así, entre risitas y cachondeo, empieza la fiesta. Para ello, la alineación presentada por Beniaján fue un equipo de gala, con la única falta de su tercer tablero, donde jugó Pedro, y perfectamente cubierta con la incorporación de Jesús Alcaraz que actuó de cuarto. Así, acudieron a la cita nuestros dos ex-, que no quisieron perderse el encuentro. Similar fue la alineación Trovera, ya que pusimos en juego toda nuestra artillería pesada, salvo la ausencia de Juanjo por decisión técnica, sustituido en esta ocasión por Luis. Como es costumbre, el resto del equipo anduvo por allí animando y echando unas amistosas en nuestra sala de análisis (sí, también tenemos de eso). A ver si para el próximo encuentro compramos unos pompones en plan cheer-leaders.
Como siempre, preparación minuciosa previa al partido
Alineación trovera: de izq. a dcha.:
Dani, Francisco, Benito y Luis.
¡Ay si las miradas mataran! Francisco habría ganado de calle...
De izq. a dcha.: Jesús, Pedro, José y Juan.
No, no son una delegación de los apóstoles, sino los jugadores del Casino de Beniaján.
La primera partida en despacharse fue la disputada en el cuarto tablero (Jesús Alcaraz-Luis Sánchez, 0,5-0,5), donde nuestro jugador pasó unos ligeros apuros en la apertura, teniendo que cubrir una combinación a base de clavadas y ataques dobles con su rey aún en el centro. Una vez solventado el problema y conseguido el enroque, se produjo un intercambio de piezas que dejó una situación plana. El negro podía quedar con un peón de ventaja, pero sin embargo tenía los de su enroque doblados y aislados. Por su parte, el blanco podía forzar un jaque continuo. Acuerdo de tablas y a esperar qué ocurría en el resto de tableros. Buen resultado de Luis, que en su debut este año continúa invicto tras dos partidas y que ha conseguido solventar un papelón ante un jugador muy seguro como es Jesús, quien en las dos últimas temporadas aún no conoce la derrota.
Tablero 4: posición final. Si el negro juega Dxb2, el blanco dispone de Dg4 y jaque continuo.
Los dos siguientes resultados cayeron en forma de victorias foráneas.
En el tablero uno (Daniel Giménez-Juan Antonio García) la partida discurría igualada, con ambos reyes renunciando al enroque pero con un intercambio de damas y piezas menores prematuro, lo que unido a que una de las principales características de Dani es la no comisión de errores, parecía asegurar al menos unas apacibles tablas; sin embargo, toda regla tiene su excepción, y en esta ocasión nuestro primer espada se dejó cazar en un ataque de alfil a ambas torres, interpuestas éstas en diagonal, que le originó pérdida de calidad. El negro aprovechó para centralizar previamente sus piezas y quedar en una posición netamente superior, con amenazas de mate y con el tiempo de Dani casi expirado. Victoria visitante.
Tablero 1. Posición fatídica en la que negro gana calidad con Af5.
En el tablero dos (José Juan Alcaraz-Francisco José Martínez, 1-0) se dio una situación parecida, aunque aquí la partida fue mucho más movida y plagada de errores por ambas partes. Tras la apertura Francisco quedó con el enroque debilitado, lo que le originó que un inicial intercambio de piezas lo aprovechara su contrincante para amenazar mate con la dama. Hubo que ceder la calidad para pararlo y la partida se puso cuesta arriba. Sin embargo, Francisco tiró de casta y reorganizó sus fueras restantes para atacar al monarca blanco con todas ellas, montando un ataque de dama, torre y alfil, al que se sumaba el peón avanzado de la columna h, mientras que el blanco, confiado, se dedicaba a intentar abrir el otro flanco mediante el intercambio de peones. Aquí, un error del blanco le hizo perder de golpe tres puntos (Fritz)... contrarrestados inmediatamente por un nuevo error local que dejó la situación en un ¡+13! para el blanco... que a continuación volvió a marrar y a dejar la situación en ligera ventaja blanca e igualdad posterior. Intercambiadas todas las piezas, tres peones blancos contra cuatro negros (dos de ellos doblados) daban unas tablas seguras. Pero... nuestro jugador falló en algo que se aprende en el capítulo I de finales de peón: no supo encerrar al rey rival con su peón de torre y le dejó el paso expedito para coronar y ganar la partida. Una lástima, porque tras la remontada y vistos los errores por ambas partes todo apuntaba a un empate. Quizá se habría salvado el medio punto habiendo ofrecido tablas...
Tablero 2. A partir de esta posición donde juega el blanco (hizo g4), los errores se suceden por ambas partes, pasando la ventaja de uno a otro.
Tras esto, el encuentro ya estaba solventado a favor de Beniaján, y sólo quedaba por dilucidarse la honrilla de la victoria en el tablero tres (Benito Rioja-Pedro José Pérez, 1-0), cuya partida se alargó bastante más que el resto. Se enfrentaban dos viejos conocidos, tres años dando tumbos por la región mano a mano defendiendo al Trovero. Al igual que ocurrió en la partida anterior, hubo aquí muchos vaivenes que pudieron decantar la partida por una u otra parte. La primera veintena de jugadas se desarrolló de forma igualada, pero a partir de aquí el negro decidió cambiar su alfil por un caballo blanco, a cambio de doblar a éste dos peones y de centralizar su propio caballo a una casilla desde donde controlaba buena parte del tablero. El negro centró sus fuerzas en avanzar el peón d, que sólo podía ser capturado a cambio de dejar a las piezas mayores negras que entraran en la cocina blanca, y ambos bandos empezaron a bailar sus piezas buscando la mejor forma de conseguir o evitar el avance, según el caso. En la jugada 30, un error negro hubiera permitido al blanco capturarle un caballo por dos peones y quedar con ventaja decisiva, pero le cegó la captura del peón a con jaque, la cual le reportaba mucho menos beneficio. A partir de aquí, los apuros de tiempo empezaron a agobiar al blanco, que jugó bastante rato en el rango de 30 a 50 segundos, y Pedro dispuso de varias ocasiones de rematar la faena, incluido un bonito mate en dos que no vieron ninguno de ambos contendientes. Tras los últimos intercambios, el bando visitante quedó con caballo contra alfil, y tres peones para cada parte. Dos de los peones blancos cayeron y Benito estuvo a punto de parar el reloj, pero decidió aguantar algo más. Pedro, a pesar de tener tiempo de sobra, quería jugar extremadamente rápido para que no pudiera pensar su rival, quien rozaba la caída de bandera. Esto se unió a que se le acabó la planilla, a que todos miraban alrededor, y en definitiva, a que en un momento se le fue la pinza, y en una jugada fatídica dejó que Benito recuperara un peón y le capturara el caballo limpio. Aun así, no estaba todo decidido, pues la posición era de tablas teóricas, ya que se llegaba a un final de alfil y peón de torre coronando en casilla de distinto color al alfil; pero Pedro, desconocedor del tema o desquiciado por ver cómo se le había ido la partida, no colocó su rey donde debía y dejó que el blanco le cogiera la vuelta. Al final, avance inevitable a coronación, y abandono del negro.
Tablero 3. Con c3 el blanco hubiera obtenido clara ventaja, pero la falta de tiempo y el angelito de a7 le cegó...
Dos conclusiones podemos extraer de las dos últimas partidas:
- Cuidado con correr para que tu rival no piense. Si por ello vas a ser tú quien no va a pensar sus jugadas, te puede salir muy caro.
- No nos engañemos. Estamos en segunda regional, y hasta en las posiciones más claras puede surgir el error rival y pegar un vuelco la partida. Los encuentros de los tableros 2 y 3 pudieron ser ganados por cualquiera de los dos contendientes mucho antes del final que realmente se dio.
En resumen, desilusión trovera por no haber logrado salvar al menos el empate. La lucha por las alturas se nos pone más difícil que hace una semana, pero ojo porque hemos jugado con equipos difíciles, que además nos han presentado sus mejores alineaciones, y aun así hemos salido más o menos bien parados de ello. Ánimo y a por la cuarta jornada.
Ay, esa mirada del señor Miñarro, vale su peso en oro!
ResponderEliminarBueno , un aplauso para la persona que sacó las fotos y que captó la mirada penetrante de Francisco. Yo.
ResponderEliminarHe leido la cronica que se ha hecho en el blogs de beniajan y quisiera hacer algunas connotaciones (lo escribo en nuestro blogs porque mi intencion no es crear un conflicto sino narrar objetivamente el encuentro de ayer)
ResponderEliminarCuando dice en el encuentro 2 que el intercambio final de peones dio al traste con...Creo que se le olvida decir que eran tablas teoricas (pero teoricas, teoricas)
tampoco compartimos el rybka y yo las cronicas de las partidas 3 y 4, pero me centrare en lo que a mi estrictamente se refiere:
cuando dice "El primer tablero no tuvo mucha historia, puesto que desde el principio el jugador visitante se mostró muy por encima de su rival" supongo que lo de PRINCIPIO y MUY por encima lo dice porque hasta la jugada 27 ningun jugador consiguio una ventaja superior a 0.28 (despues de esa jugada tuve un error clamoroso)
no entiendo como perdió miñarro, si yo fuera su rival hubiera salido corriendo a la primera miradita....viva, viva mi maridito que no pierde ninguna partida!!!arriba trovero marin!!!
ResponderEliminarLa verdad es que la crónica desde Beniaján ha sido un tanto subjetiva ...
ResponderEliminarSiiii , viva Luis, el mas guapo del equipo y de todo el campeonato regional .
ResponderEliminarMuy buenas a todos,
ResponderEliminarQuisiera que permitierais aclarar alguna cosillas respecto de los comentarios que estoy viendo en este blog, sobre todo con Dani, a quien además le tengo mucho aprecio: es normal que hasta el movimiento 27 (o el 30 o el 35) de una partida no haya grandes diferencias, todo depende de como se hayan hecho esos 27 movimientos y como te hayas quedado. Nunca quise decir nada para minusvalorar a un jugador rival, sino que según he visto y segun me han explicado, nuestro jugador no tuvo muchos problemas para ganarla.
Las cronicas (Luis), nunca escritas desde la subjetivad, siempre narran lo que une ve desde las planillas y los comentarios de los compañeros. Evidentemente me puedo equivocar en detalles, si fuera Leontxo Garcia no habría problemas pero, por desgracia para mi, estoy a años luz.
Pido disculpas si a alguien le ha sentado mal o la ha interpretado de manera diferente a la mía (otrosí algo normal, entiendo).
Saludos cordiales,
CAC Beniaján
Pero bueno, que esto es un blog (para pasar el rato) relativo a un equipo de ajedrez (que también es para pasar el rato, qué más quisiera alguno poder vivir de esto), así que ¡haya paz XD!. Pedro ¿recuerdas lo que hablábamos a mediados de la semana pasada de que nuestras respectivas crónicas parecerían una misma noticia comentada por El País y La Razón? Pues eso. (Aunque quede claro que ya que la objetividad absoluta no existe, la menos subjetiva será siempre la nuestra, of course).
ResponderEliminarPor cierto Vero, gloriosa tu entrada en el mundo de los comentarios troveros. Así que veo yo a Luis con la moral con las nubes, si con esos ánimos que tiene en casa...
Bueno, bueno, mi mujer tan graciosilla como siempre. Entre ella y Mariflor no me van a dejar disfrutar de mis tablicas. En fin, corroborando lo dicho por her Kapitan: que pelillos a la mar, pero que vamos sigo pensando lo mismo (sin querer ofender a nadie, ni que nadie se sienta ofendido, of course) , y que en definitiva es curiosa la versión que se tienen de las partidas según quien las vea.
ResponderEliminarLo único que lamento es que los de Beniaján no se hayan llevado a Mariflor con ellos.
No me sale de la flor irme a ningún sitio al que no quiera ir, y al lado de la huerta menos.
ResponderEliminarse pueden contar las cosas de una manera o de otra y luego los demas sacan sus conclusiones. la mia es que os pudieron endosar un rosco y qu emucho pudisteis ganar por la minimia asi que la media operativa del rango que va de 4 a 1,5 para beniajam y 0 a 2,5 para vosotros seria el resultado justo teniendo en cuenta las vueltas que dan las partidas que jugamos los paquetes
ResponderEliminar2,75 - 1,25
ResponderEliminarMe encanta la gente que hace comentarios como anónimo. Saludos desde la calle Génova .
ResponderEliminarEl comentario de anonimo tiene razón, el resultado pudo ser desde 4 a 0 para ellos a 2,5 a 1.5 para nosotros, y desde luego que mi partida dejo mucho que desear por mi parte; lo unico que lo de muy superior desde el principio y las demas valoraciones me chocaron un poco. Bueno suerte para beniajan en lo que resta de campeonato y en particular para Pedro que ha/está haciendo una gran labor de equipo.
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