Aciago final de campeonato para los dos
equipos troveros en liza, que volvieron de Blanca con sendas
derrotas. Por ser la última ronda, esta vez nos despachamos con una única crónica para ambos.
Como decíamos en la anterior entrada, problemas de tipo logístico nos impidieron preparar con la debida antelación las salas de juego en las que debían disputarse los encuentros de ambos equipos troveros. Precisamente el único día en veintiséis años en el que disputamos dos encuentros simultáneos en casa, es el único en la historia en que al llegar nos lo encontramos todo incomprensiblemente cerrado. Sin entrar en detalles de los motivos, el caso es que tras varias gestiones y acumulando un cierto retraso con respecto a la hora prevista conseguimos que un representante de la AAVV acudiera en nuestro auxilio, y allá que entramos a montar la fiesta sin mayor demora. Empezó mal la jornada en esta
sexta ronda, con problemas de acceso al local a los que haremos
referencia en la crónica del B. Y como quien mal anda mal acaba, a ello siguió la segunda derrota
de equipo, de forma consecutiva y una vez más por la mínima. Por cierto, manda carallo
que sean precisamente los dos equipos de Cartagena los que nos han
puesto las banderillas. Anda que te podrás fiar del vecino...
Definitivamente no hay que tomar los refranes al pie de la letra, o por lo menos ése que dice que "no hay quinto malo". Sí lo hubo para el Trovero A en esta ronda, que ha supuesto el fin de la imbatibilidad que hasta ahora ostentábamos. Con ello, el nuevo líder pasa a ser el equipo de Sauces B, que nos saca un punto, pasando el Trovero al tercer puesto con idéntica puntuación que el Murcia Chess Club, ocho, y con Beniaján B, Jumilla B y Lapuerta D Minitiburones pisándonos los talones con siete. Esto se pone al rojo vivo para las dos rondas que quedan.
Ha habido que esperar un poco, pero por fin llegó la primera victoria de equipo del Trovero B (si no contamos la del bye), en esta ocasión ante la Escuela de Ajedrez de Abarán; sin embargo, lo más destacable del encuentro no fue esta victoria sino la actitud deportiva del equipo local, con varios gestos a destacar como ahora veremos.
Vuelta al tajo del Trovero B tras el bye disfrutado en tercera ronda, merecido descanso donde los haya, y a su vez premiado con la primera victoria en el casillero del equipo. En esta ocasión el rival fue el vecino Lapuerta C, equipo de jugadores veteranos que también ronda por la zona baja de la tabla a la espera de tiempos mejores.